El turismo requiere entender de las diversas herramientas del business inteligence que existen para poder comprender mejor los mercados, algunas oficinas, secretarias y ministerios de turismo, de diferentes ciudades y países, así como algunas empresas del sector lo entienden perfecto y lo aplican para la segmentación, definición de los diversos buyer personas que existen, para poder definir estrategias exitosas.
Los ERP's dan a las empresas información interconectada de las diferentes áreas de una organización turística, una herramienta que no todas las empresas utilizan, pero no basta con entender los procesos internos, sino mantenerse al día con la información externa de gustos en el mercado y hoy la big data da información contundente de los gustos del consumidor, así como los hábitos de compra de los viajeros en el mundo, datos que pueden ser consultados, lo que permite saber dónde, cómo y cuándo consumen los viajeros en un destino determinado, así como información demográfica precisa.
Pero no basta con tener esa información, sino aplicar ciencia de datos para entender y analizar, para poder tomar decisiones correctas que generen productos turísticos que se acoplen a los diversos gustos del consumidor.
Los negocios turísticos tienen apurarse en la implementación de tecnología en la comercialización de sus empresas, ya no basta con tener un website o app, se requiere de la implementación de herramientas como la inteligencia artificial que genere recomendaciones personalizadas o atención al cliente con bots que den soluciones correctas.
Estamos a muy poco que los asistentes de voz como Google, Siri o Alexa puedan realizar reservaciones de paquetes turísticos y que entiendan nuestros gustos específicos, y los prestadores de servicios tendrán que acoplarse a esos lenguajes y sistemas de compra.
Bien lo decía Bill Gates, "Habrá dos tipos de negocios en el Siglo XXI, aquellos que estén en la Internet y aquellos que ya no existan”.